Las proteínas, son macromoléculas que cumplen una función imprescindible para la conformación de las células del cuerpo. Por consiguiente, se sabe que son fundamentales para el crecimiento y la regeneración de tejidos y músculos.
Del mismo modo, se dedican a regular ciertas actividades o funciones dentro del organismo. Su origen, proviene de la unión de los aminoácidos, que se van convirtiendo en cadenas muy largas y estables.
Por otro lado, las proteínas se pueden clasificar según su composición química, que vienen a ser simples y complejas. O, de acuerdo con su conformación, cuyas subclases serían fibrosas, globulares y de membrana.
ÍNDICE
Clasificación de las proteínas según su composición química
Estos grupos se refieren al contenido y a la estructura de las cadenas moleculares de las proteínas, es decir, su composición química.
Simples u holoproteínas
Las proteínas simples son aquellas que resultan luego de sintetizarse por medio de una reacción química, conocida como hidrólisis. En otras palabras, esta clase de proteínas son degradadas por acción de los ácidos y las enzimas, dejando como resultado solo los aminoácidos, que luego serán requeridos por el cuerpo para cumplir muchas funciones importantes.
Existen, al menos, siete subtipos en esta clasificación de proteínas, tres de ellas serían:
- Albúminas, originadas durante el proceso metabólico que lleva a cabo el hígado, se encuentran en gran porcentaje dentro de la sangre, cumpliendo también una función de transporte para algunas hormonas.
- Glutelinas, entran al organismo, generalmente, gracias al consumo de ciertos vegetales. Posee una característica de fácil disolución en sustancias como los ácidos estomacales.
- Globulinas, siendo de gran ayuda para la coagulación y la cicatrización, se encuentran grandes cantidades de ellas en el torrente sanguíneo, y entran al cuerpo luego de la ingesta de lácteos y otros alimentos de origen animal.
Complejas o heteroproteínas
Precisamente, se trata de un grupo más complejo, pues, se sabe que son producto de reacciones químicas, donde algunas proteínas son alteradas y terminan convirtiéndose en aminoácidos, o en otros tipos de compuestos.
De la misma forma, se han establecido varios grupos de proteínas dentro de esta categoría:
- Nucleoproteínas, proteínas producto de la disolución de otras proteínas por la acción de algunos ácidos.
- Fosfoproteínas, encontradas con facilidad en los lácteos, son el resultado de la unión de alguna proteína con componentes fosfatos.
- Lipoproteínas, se forman por la integración de una proteína con algún lípido, caracterizadas porque no pueden ser disueltas.
- Metaloproteínas, su origen es único, dado que no proviene de alguna proteína, sino de la reacción química de algunos agentes metálicos.
Clasificación de las proteínas según su conformación
Basándose en la forma de cada proteína, es posible clasificarlas en tres grandes subclases:
Proteínas fibrosas
Las cadenas polipeptídicas son las que forman su estructura, proporcionándoles una apariencia similar a la de una fibra, de ahí deriva su nombre.
Existen varias proteínas muy conocidas de este tipo, una de ellas es el colágeno, que funciona como uno de los componentes principales en la formación de los tejidos.
Proteínas globulares
Se diluyen fácilmente en el agua, y su esqueleto peptídico se ordena para tomar la forma, más o menos, de una esfera.
Probablemente, las proteínas globulares más reconocidas son las hormonas, dedicadas a regular muchas funciones celulares, que se desarrollan en el metabolismo y el ciclo de reproducción.
Proteínas de membrana
Estos son proteínas, cuya estructura está ligada a la bicapa lipídica. Es decir, se encuentran dentro de la membrana plasmática de las células. Pueden llegar a ser extrínsecas, que solo permaneces unidas a la membrana gracias a la existencia de uniones, como por ejemplo, el puente de hidrógenos. Igualmente, están las proteínas intrínsecas, que sí se encuentran dentro de la membrana.